El obispo auxiliar de Getafe, D. José María Avendaño, viajó el pasado 25 de febrero desde Getafe hasta la Aldea del Rocío para encontrarse por primera vez con la santísima Virgen del Rocío.
Este viaje surgió de la estrecha relación que mantiene con la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Madrid Sur Getafe, establecida canónicamente en la Parroquia Santa Maravillas de Jesús, cuyo párroco, Luis Manuel Vallecillo, que es capellán de la Hermandad, también les acompañó.
A su llegada a la Casa de Hermandad fue recibido por un gran número de hermanos que allí se encontraban y por la Junta de Gobierno. Después, el presidente de la Hermandad, Francisco José Carrillo, le hizo entrega de un cuadro en el que se encontraba el Simpecado de esta asociación pública de la Iglesia y a su vez, le fue impuesta la medalla de la Hermandad.
El domingo primero de Cuaresma, a las 9.00 horas, el auxiliar presidió la eucaristía en el Santuario de la Virgen destacando que la peregrinación “es un signo y no una excursión”.
La santa misa fue cantada por el Coro Joven de la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Huelva.
Una vez finalizada la eucaristía, acudió a la Capilla votiva a encender velas de promesa y visitó el Tesoro Museo de la Virgen del Rocío, en el que pudo contemplar parte del ajuar, exvotos y numerosos elementos de que dispone la Patrona de Almonte.
Además, pudo ver y venerar el Simpecado de nuestra Hermandad madrina, la Hermandad del Rocío de San Juan del Puerto y saludar a su Presidente y miembros de la Junta de Gobierno.Antes de su regreso a Getafe, disfrutó y compartió momentos con los más pequeños de la Hermandad así como con el resto de hermanos que habían acudido a esta peregrinación.