03/11/2023. El obispo D. Ginés García Beltrán presidió la celebración de Todos los Santos en la mañana del 1 de noviembre, en la Catedral Santa María Magdalena (Getafe).
En su homilía el prelado insistió en su llamada a la santidad: "la vocación del cristiano es la santidad. Hemos sido convocados desde el Bautismo a ser santos".
En referencia a las lecturas del día, Mons. García Beltrán explicó que "todos hemos recibido en el Bautismo la túnica blanca y la palma del testimonio, porque mártir significa testigo. Hay muchos modos de testimonio. ¡Cuántas personas hay, que en su debilidad y pobreza han sido expresión de las bienaventuranzas que hemos escuchado hoy en el Evangelio!".
"Ojalá hoy salgamos de este templo diciendo: el Señor me recuerda que no me puedo conformar con menos. Mi meta es el cielo, la santidad" insistió D. Ginés.
"Los santos son una luz en el camino de las tinieblas de mi vida y del mundo. El ejemplo de cada santo nos dice que las bienaventuranzas, que parecen tan difíciles de cumplir, son posibles con la gracia. Los santos nos enseñan la primacía de la gracia" declaró.
"Los santos son un ejemplo para nosotros a imitar y seguir, con su vida y su experiencia nos enseñan a vivir como cristianos" subrayó el obispo.
El prelado quiso transmitir una palabra de ánimo a todos los presentes destacando que "el Señor suscita santos en todos los ámbitos de la vida. El papa canonizó hace poco a los padres de santa Teresita del Niño Jesús como ejemplo de santos en la vida matrimonial. Y también a una familia polaca entera, que murió mártir de un sistema político demoledor".
"Hay muchos modelos de santidad que nos dicen que la santidad no es para una elite sino una llamada para todos. La santidad también es una herencia. Porque somos sus hijos Dios nos ha dado como herencia la vida eterna, donde seremos dichosos y felices al contemplar su rostro" añadió.
"Vamos a atrevernos a ser santos. Para eso nos sirve el ejemplo de la Virgen nuestra Madre. Que su intercesión y la de todos los santos hagan que tengamos un corazón según el corazón de Dios" concluyó.
Al término de la celebración el obispo también quiso encomendar a todos los familiares difuntos de los allí presentes rezando un responso por el eterno descanso de su alma.
Por la tarde el prelado se trasladó hasta el Cementerio de Boadilla del Monte donde también presidió una eucaristía en la que recordó la llamada a la santidad "que el Señor nos hace a todos y cada uno de nosotros".
D. Ginés estuvo acompañado del arcipreste, Julio Rodrigo Peral, y de otros sacerdotes del arciprestazgo de Villaviciosa de Odón, donde el lunes 6 de noviembre comenzará la visita pastoral.
El obispo explicó las lecturas y quiso hablar también de los santos "los 144.000 -número simbólico que significa plenitud- y que son los elegidos que están con Dios en el cielo, santos conocidos y desconocidos, personas sencillas, anónimas que están ya con el Señor".
Quiso aprovechar también para recordar a todos los familiares difuntos que gozaban del descanso eterno, subrayando la llamada a la santidad y el ejemplo que nos proporcionan los santos.