Los miembros del Camino Neocatecumenal han comenzado a evangelizar en las tardes de los domingos del tiempo pascual por las plazas de distintas localidades del territorio diocesano.
Alcorcón, Ciempozuelos, Leganés, Getafe, Móstoles o Valdemoro son algunas de las que acogieron estos encuentros testimoniales en la tarde del domingo 23 de abril.
En el transcurso de los mismos se ofrecieron distintas experiencias de conversión y breves catequesis invitando a las personas que les observaban a reflexionar sobre sus vidas y a acudir a la Iglesia.
Una de las experiencias compartidas en Alcorcón fue la de un joven esposo de 33 años que relató cómo en su juventud la vivencia del mundo de la noche le llevó a una pérdida del sentido de la vida y a sentirse profundamente solo.
En esta situación unos catequistas le hablaron de Cristo y de su amor incondicional y "al volver a la Iglesia" se transformó su vida.
Hoy es padre de cinco hijos y vive la fe en una comunidad del Camino en la Parroquia San Saturnino.
Un testimonio parecido compartió otro joven padre a quien el alcohol y las drogas le alejaron de Dios en la adolescencia y la juventud, "y gracias a Cristo y a su actual mujer se ha transformado completamente".
La tarde de experiencias tuvo como punto culminante una breve catequesis en la que un adulto joven de Alcorcón, esposo y padre de cuatro hijos, Joaquín Gómez, animó a los presentes a reflexionar sobre la importancia de Dios en la vida de cada uno.
"Te has preguntado sobre la existencia de Dios?, ¿sobre su actuación en tu vida? ¿Dios tiene algo que ver con tu trabajo, con tu familia con tus sufrimientos? ¿te siente querido por Dios?" preguntó.
A través de la historia de Abraham y de su propia experiencia, en la que habló del vacío interior que sintió en la juventud al intentar ser feliz alejado de Dios y del profundo amor del Señor que había actuado en su vida permitiéndole ser padre cuando la ciencia le negaba la paternidad, Gómez invitó a los presentes a la búsqueda del sentido de la vida en Dios.
"Dios da sentido a tu vida. El sentido no es tener trabajo o dinero. Dios te ha creado para ser amado y para amar. Dios no te pide nada, no te juzga, no le importa lo que hayas hecho, Él te quiere con locura" subrayó.
El encuentro concluyó con una oración de acción de gracias y con un canto.