18/01/2024. La comunidad china de Parla está de enhorabuena ya que este sábado el obispo de la diócesis Mons. Ginés García Beltrán ha confirmado a varios jóvenes de la comunidad china de Parla en una celebración en la Parroquia Santos Justo y Pastor a la que han asistido numerosos miembros de esta comunidad.
Después de la Liturgia de la Palabra en chino, el obispo ha dirigido unas palabras a los confirmandos. En ellas ha explicado el sentido del Sacramento y ha animado a toda la comunidad china a continuar dando testimonio de su fe.
Mons. Ginés García Beltrán ha destacado que la Confirmación “es un sacramento que fortalece”.
“Este sacramento es un momento crucial en la vida de todo cristiano, es la continuación del Bautismo donde nos convertimos en hijos de Dios. Confirma y perfecciona la gracia de tu Bautismo, nos une más profundamente a Cristo”, ha dicho dirigiéndose particularmente a los que estaban a punto de recibir el Sacramento.
García Beltrán ha continuado hablando: “Al recibirlo, somos llamados a ser verdaderos testigos de Cristo en la Iglesia y en el mundo con valentía. Tiene un profundo significado en nuestras vidas; nos capacita para enfrentar los desafíos y nos otorga los dones del Espíritu Santo que nos ayudan a crecer en nuestra vida espiritual”.
“Hemos escuchado la Palabra de Dios que siempre ilumina nuestra vida, como ilumina cada momento de la existencia: es luz para nuestros pasos, para nuestro camino de fe”.
En relación a la segunda lectura en la que el apóstol San Pablo habla de los dones del Espíritu Santo, ha recordado cómo “los jóvenes confirmarán de manera especial estos dones: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. “Estos dones –ha añadido–, son herramientas que Dios nos da para llevar su misericordia a todos aquellos que encontramos”.
“Esta promesa de amor nos recuerda que Dios nunca nos abandona, en momentos de dificultad Él siempre está presente, es una promesa de esperanza”, ha reconocido.
“En el Evangelio según San Juan se narra el milagro de las bodas de Caná. Fue el primero y un signo de su poder divino. Mas allá del milagro, este acto es un signo profundo de la transformación que Jesús trae a nuestras vidas”.
A continuación, ha dirigido unas palabras especiales para toda la asamblea: “La comunidad china de Parla es un testimonio viviente de fe y dedicación. Vuestro compromiso con la Iglesia nos muestra la riqueza cristiana y la universalidad del amor de Dios”.
“Vuestros testimonios de fe en medio de las dificultades y desafíos es un ejemplo para todo. En un mundo hostil y de indiferencia a la fe estáis llamando a ser luces brillantes, testigos de esperanza”.
Mons. Ginés García Beltrán ha pedido a los confirmandos recordar siempre que "Dios está con vosotros para transformar vuestra vida y guiaros con amor y misericordia”.
“Estos dones no solo os benefician a vosotros, sino a toda la comunidad: usadlos con generosidad, sed testigos del amor de Cristo en todo lo que hacéis”.
Por último, ha pedido dirigir los corazones “hacia la Virgen María bajo la advocación de Nuestra Señora de Sheshan, patrona de los católicos chinos”, a los que ha pedido interceder por ellos y que “guíe a la comunidad china de Parla” para que “vivan en armonía siendo signos de la esperanza y del amor de Dios”.
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