22/02/2025. La diócesis celebra el III Congreso de Educación organizado por la Delegación de Enseñanza con la asistencia de más de 100 personas en el que importantes figuras del ámbito educativo, cultural, social y religioso ofrecen su punto de vista sobre la educación en el mundo de hoy bajo el lema ‘La esperanza en la educación’.

En la mañana del sábado, el obispo de Getafe. Mons. Ginés García Beltrán, ha celebrado la eucaristía en la Parroquia Santa Maravillas de Jesús en Getafe. En su homilía, ha recordado la celebración de la fiesta de la Cátedra de San Pedro y ha comenzado pidiendo oraciones por la salud del Papa Francisco.

“Quiero aprovechar para reiterar en esta fiesta nuestra unión con el Papa Francisco, nuestra cercanía en este momento de enfermedad, de debilidad personal. Rezamos por él, nos sentimos cercanos a él”, ha dicho.

Comentando el Evangelio de la liturgia del día, ha subrayado que se trata de “una confesión de fe personal: es algo personal, lo he recibido, somos testigos por el testimonio de otro, pero la fe no arraiga en el corazón hasta que no hay una opción personal”.

“Encontramos una profesión de fe personal de Pedro que reconoce a Jesús como el Mesías. Esta confesión supone el gran grito de esperanza del cristiano ante el mundo y ante Dios. La esperanza cristiana no es un qué, sino un quién. Esperar cosas se puede confundir con el deseo que nos puede hacer pesimistas u optimistas. La esperanza cristiana va mucho más allá. Poseer el quién, reconocer al quién en mi vida, propiciar el encuentro es lo que me lleva a la esperanza”.

García Beltrán ha reconocido que uno puede pensar que tiene “razones más que suficientes para desesperar, pero soy un hombre de esperanza porque sé dónde tengo puesta mi confianza. No espero cosas, sino a Alguien. Ese amor solo puede hacer que la esperanza no se acabe, que no defraude, una esperanza sin límites”.

“Descubrir la fe y con ello las virtudes de la esperanza y la caridad como un don nos hará mucho bien. Descubrir el don y vivir en la lógica y la dinámica del don nos hará mucho bien a todos”, ha añadido.

Por otro lado, ha pedido “recuperar la lógica del don” y a preguntarse qué es la fe y cómo la transmite cada uno: “como un regalo y un don”.

“Necesitamos modelos. Nos preguntamos: ¿quiénes son hoy los modelos sociales?, ¿qué sirve hoy de modelo al hombre contemporáneo? El Señor nos llama a ser modelo para ese hombre que se acerca a ti porque sí vas a recibir la corona de la gloria que no se marchita nunca”, ha terminado.