26/10/2024. El obispo Ginés García Beltrán ha dedicado el comentario de esta semana en El Espejo diocesano de COPE a la peregrinación que los adolescentes de la diócesis, organizada por la Delegación de Juventud, están realizando a Guadalupe, en Extremadura. 

 Una caminata que “vienen haciendo todos los años, lo mismo que los que son un poco más mayores, cada año peregrinan hasta Javier, para encontrarse con la memoria y con el testimonio del gran santo misionero”.

Se trata de una “peregrinación mariana” en la que se va “al encuentro de nuestra madre, la Virgen María”. “Esta madre que tocó el corazón de tantos misioneros que la llevaron hasta América, hasta tal punto que en América la gran reina es la Virgen de Guadalupe, en este caso la mexicana. Pero esto nos recuerda que la fe nació de aquí, de nuestro pueblo, nació de España, de nuestros antepasados, que no solo llegaron a aquellas tierras para sacar de ellas lo mejor que había, para llevar la civilización, sino también la fe”, ha dicho en los micrófonos de COPE.

Recordando que el pasado domingo se celebró el DOMUND, la Jornada Mundial de las Misiones, subraya que es “una llamada a ser misioneros también hoy” puesto que “tenemos que ser misioneros también dentro de nuestra tierra”.

“Hay muchas personas que no conocen al Señor, hay muchas personas que no se acercan a la Iglesia, y para eso nosotros tenemos que renovar el compromiso de ser una Iglesia verdaderamente misionera”. 

Mons. Ginés García Beltrán se muestra convencido de que “los chicos, las chicas, los adolescentes que van a ir hasta Guadalupe van aprendiendo que tenemos que hacer camino, que tenemos que ir a María y ojalá que también aprendan que tenemos que ser misioneros” y expresa que “la misión, la evangelización, forma parte de la esencia de la Iglesia”.

“Ya nos lo enseñó San Pablo VI, la Iglesia existe para evangelizar. Nosotros, cada uno de nosotros, tiene que sentirse un verdadero evangelizador, un hombre, una mujer, un joven, un adulto que lleva al Señor en su corazón y que se lo da a los demás. Una de las grandes tareas de la Iglesia, por tanto, está en la transmisión de la fe, la fe que empieza en las familias”.

Sobre esta transmisión de la fe que “hemos recibido” gracias a “la fe de nuestros padres, de nuestras familias”, hemos “de llevarla a los demás en la casa, en el trabajo, por supuesto en nuestras parroquias, que tienen que ser también verdaderas comunidades misioneras”.

Concluye pidiendo la intercesión de la Virgen de Guadalupe para que “acompañe el camino de estos jóvenes, acompañe nuestro camino y nos lleve siempre al Señor”.

 

Puedes escuchar el comentario en el siguiente vídeo:

 

 

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