Algunas de las parroquias de la diócesis se están preparando para celebrar la llegada de la Luz de la Paz de Belén y acogerla en sus hogares.
Una tradición en el tiempo de Adviento que simboliza la paz y la esperanza. Cada año, una vela se enciende en la Iglesia de la Natividad en Belén y se distribuye por todo el mundo, llegando a las parroquias de la diócesis que quieran acogerla.
Esta luz es llevada por scouts y voluntarios a diferentes países, promoviendo un mensaje de unidad y solidaridad.
Humanes de Madrid
En la Parroquia Santo Domingo de Guzmán, en Humanes, han retrasado la celebración hasta el día 20 de diciembre, y los fieles recibirán la luz de Belén en la misa de las 19.30 horas.
Las familias que deseen recibirla deben portar un farolillo para llevarse la luz a casa.
Valdemoro
El convento de la Encarnación, de las clarisas, en Valdemoro, recibirá la Luz de Belén el sábado 21 de diciembre. A esta celebración están invitados también todos los fieles diocesanos, que quieran llevar esa luz hasta sus hogares para iluminarlos.
Los que deseen llevar la luz a casa o a sus parroquias deben llevar unas velas o unos farolillos para poder transportala.
Origen de 'La luz de Belén'
Esta iniciativa nació en la televisión pública austriaca a finales de los 80 y principios de los 90 del siglo pasado, dentro de un programa social denominado 'Luz en la oscuridad', dedicado a los niños con necesidades tanto en Austria como en el extranjero.
En 1990 se firmó un acuerdo entre scouts y guías de muchos países para permitir que la luz viajara por Europa y América.
Cada año, un niño o una niña del norte de Austria recoge la luz de la cueva donde nació Jesús en Belén y la lleva a Europa, en una ceremonia ecuménica que tiene lugar en Viena semanas antes de la Navidad.
Después, los scouts la distribuyen por parroquias, hogares particulares, hospitales, residencias de ancianos, prisiones y otras asociaciones de sus respectivos pueblos y ciudades.