• El obispo D. Ginés García Beltrán presidirá la Vigilia de la Inmaculada en la Basílica del Cerro de los Ángeles, el 7 de diciembre, a las 21.00 horas, acompañado del obispo auxiliar
• La patrona diocesana, la Virgen de los Ángeles, coronada en plata, ocupará un lugar privilegiado en el altar
• La celebración estará cargada de símbolos que ayuden a los fieles a vivir el dogma de la Inmaculada Concepción
Getafe, 5 de diciembre de 2023. La Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, situada en el Cerro de los Ángeles, centro geográfico de la península ibérica, acogerá el próximo jueves 7 de diciembre, a las 21.00 horas, la tradicional Vigilia de la Inmaculada, organizada por la Delegación diocesana de Juventud en colaboración con la de Apostolado Seglar y la de Liturgia.
La celebración -cargada de símbolos que ayuden a los fieles a vivir el dogma de la Inmaculada Concepción- estará presidida por la patrona diocesana, la Virgen de los Ángeles, colocada en el altar en su talla de madera policromada en blanco y azul y coronada en plata, que ha sido trasladada desde el convento de las MM. Carmelitas del Cerro.
La imagen de la Virgen estaba visitando este Monasterio desde el pasado 26 de noviembre, solemnidad de Cristo Rey, con motivo del Año Jubilar concedido por la Santa Sede al Monasterio del Sagrado Corazón de Jesús y Santa María de los Ángeles, por el Centenario de su fundación.
El acto comenzará con el tradicional canto oriental dedicado a la Virgen María del Akathistos (un antiguo himno litúrgico que ensalza el misterio de María) cuya oración será acompañada por el obispo auxiliar D. José María Avendaño y, a continuación, se rezará el santo Rosario.
El canto será interpretado por parte del coro diocesano acompañado por el coro del Seminario Mayor bajo la batuta de Javier Ávila, quien también acompañará la celebración posterior de la eucaristía, presidida por el obispo diocesano, D. Ginés García Beltrán, y concelebrada por el auxiliar, vicarios episcopales y sacerdotes.
Después del Akathistos se rezarán los misterios luminosos del Rosario y se invocará a la Virgen como modelo de caridad.
En la introducción de cada misterio dos jóvenes portarán una vela -símbolo de la luz de Cristo- y se pedirá por distintas realidades de la Diócesis: por los catecúmenos; los novios, matrimonios y familias; los misioneros y evangelizadores; los cristianos perseguidos y por las vocaciones.
Además, se introducirán nuevos títulos marianos en la segunda parte del rezo del Ave María en el segundo y cuarto Misterio del Rosario.
Destaca el obispo de Getafe, D. Ginés García Beltrán, que “en la Virgen María vemos el misterio del amor de Dios que la eligió antes de todos los tiempos y fue preservada del pecado para que fuera un templo precioso en el que Dios se hiciera hombre. Dios ha elegido a María y la ha destinado a ser santa, la ha destinado para que dé muchos frutos y consumar en Ella la historia de la salvación”.
El dogma de la Inmaculada Concepción de María fue proclamado en 1854
El dogma de la Inmaculada Concepción de María fue proclamado por el Papa Pío IX el 8 de diciembre de 1854, en su bula Ineffabilis Deus. Este dogma sostiene que, por una gracia especial de Dios, la Virgen María fue preservada de todo pecado desde el momento de su concepción, es decir, desde el instante en que María comenzó la vida humana.
En otras palabras, María fue preservada inmune de toda mancha de la culpa original en el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Cristo Jesús, Salvador del género humano.
Más información:
Paloma Fernández
Tel: 91 696 17 65 / 672 31 18 01 / 639 936 939
Correo electrónico: